History of Spain
Soria: Cabeza de Extremadura
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https://historyofspain.es/
En las inmediaciones de Soria se han descubierto pinturas rupestres, y hubo un asentamiento celtíbero de la edad del bronce dependiente de la ciudad de Numancia, poblada por los Arévacos.
La resistencia de Numancia representa el valor de un pueblo que quiso morir en defensa del bien más preciado: la libertad, ante el ejército más poderoso de su época, el romano, al mando de Publio Cornelio Escipión.
Durante el siglo VI, en época visigoda, vivió en Soria el ermitaño San Saturio en el lugar que ahora ocupa la ermita que se construyó en su honor.
El rey Alfonso I el batallador conquista la ciudad a los árabes en el año 1109 y la repuebla convirtiéndose en enclave decisivo entre los distintos reinos de la península, hasta la definitiva anexión a la corona de castilla en 1134.En Soria nace Alfonso VIII de Castilla, casado con Leonor de Plantagenet. En su lucha contra la invasión almohade fue derrotado en la batalla de Alarcos en 1195 y vencedor en la de las Navas de Tolosa en 1212.
En la Edad Media, la actividad económica soriana giraba en torno a la lana, un gran negocio controlado por el Concejo de la Mesta. Soria era “cabeza de Extremadura” pues la provincia era cabecera de varias cañadas reales que bajaban por la Extremadura castellana de entonces, donde se realizaba la trashumancia del merino.
El rey Juan I de Castilla fue derrotado en la batalla de Aljubarrota en 1385 por los derechos al trono portugués, en la que pereció la mayor parte del contingente soriano que luchó a su lado.
También supusieron grandes daños económicos para Soria la guerra de sucesión por la corona de España en 1701 y la guerra de la independencia en 1808 contra la invasión napoleónica. El ferrocarril llegaría a Soria en 1892.
Soria conserva un importante patrimonio románico como la Iglesia de Santo Domingo del siglo XII con un gran rosetón en su portada. La iglesia de San Juan de Rabanera es un exponente del románico castellano. Otros monumentos destacables son la arcada del claustro del monasterio de San Juan de Duero o la concatedral de San Pedro.
En arquitectura civil tenemos la plaza Mayor, con su fuente de los leones, y la casa del común, donde se conservan los fueros de la ciudad. El palacio de los Condes de Gómara de estilo renacentista, hoy Palacio de Justicia, el palacio del Vizconde de Eza y también la casa de los 12 linajes, actual ayuntamiento. También dispone de un Parador Nacional con bonitas vistas de la ciudad.
Gustavo Adolfo Bécquer nombra a Soria en varias de sus leyendas, entre ellas la leyenda del monte de las ánimas. También es citada por Antonio Machado en sus versos Campos de Castilla ¡Soria fría, Soria pura cabeza de Extremadura¡ ” y en el romance del Duero de Gerardo Diego.
En sus alrededores se encuentran poblaciones como Almazán, con la iglesia de San Miguel y su cimborrio. Burgo de Osma, donde destacan la catedral con su claustro y la universidad renacentista de Santa Catalina.
Medinaceli es famosa por su arco romano y San Esteban de Gormaz por su castillo y la iglesia de San Miguel. También en la provincia encontramos la fortaleza de Berlanga de Duero o el pueblo de Calatañazor donde “Almanzor perdió su tambor”.
Soria cuenta con parques naturales como el del cañón del río Lobos o el de sierra de Urbión y laguna negra.
La gastronomía soriana destaca por platos como las migas de pastor o los torreznos, el cordero asado o la caldereta y por sus setas, especialmente los níscalos y los boletus, así como por la trufa negra. Un buen acompañamiento son sus vinos con denominación de origen Ribera del Duero. Son reseñables productos como la mantequilla soriana y las yemas de Almazán.
Documentado por Alvaro de Marichalar y Saénz de Tejada
En las inmediaciones de Soria se han descubierto pinturas rupestres, y hubo un asentamiento celtíbero de la edad del bronce dependiente de la ciudad de Numancia, poblada por los Arévacos.
La resistencia de Numancia representa el valor de un pueblo que quiso morir en defensa del bien más preciado: la libertad, ante el ejército más poderoso de su época, el romano, al mando de Publio Cornelio Escipión.
Durante el siglo VI, en época visigoda, vivió en Soria el ermitaño San Saturio en el lugar que ahora ocupa la ermita que se construyó en su honor.
El rey Alfonso I el batallador conquista la ciudad a los árabes en el año 1109 y la repuebla convirtiéndose en enclave decisivo entre los distintos reinos de la península, hasta la definitiva anexión a la corona de castilla en 1134.En Soria nace Alfonso VIII de Castilla, casado con Leonor de Plantagenet. En su lucha contra la invasión almohade fue derrotado en la batalla de Alarcos en 1195 y vencedor en la de las Navas de Tolosa en 1212.
En la Edad Media, la actividad económica soriana giraba en torno a la lana, un gran negocio controlado por el Concejo de la Mesta. Soria era “cabeza de Extremadura” pues la provincia era cabecera de varias cañadas reales que bajaban por la Extremadura castellana de entonces, donde se realizaba la trashumancia del merino.
El rey Juan I de Castilla fue derrotado en la batalla de Aljubarrota en 1385 por los derechos al trono portugués, en la que pereció la mayor parte del contingente soriano que luchó a su lado.
También supusieron grandes daños económicos para Soria la guerra de sucesión por la corona de España en 1701 y la guerra de la independencia en 1808 contra la invasión napoleónica. El ferrocarril llegaría a Soria en 1892.
Soria conserva un importante patrimonio románico como la Iglesia de Santo Domingo del siglo XII con un gran rosetón en su portada. La iglesia de San Juan de Rabanera es un exponente del románico castellano. Otros monumentos destacables son la arcada del claustro del monasterio de San Juan de Duero o la concatedral de San Pedro.
En arquitectura civil tenemos la plaza Mayor, con su fuente de los leones, y la casa del común, donde se conservan los fueros de la ciudad. El palacio de los Condes de Gómara de estilo renacentista, hoy Palacio de Justicia, el palacio del Vizconde de Eza y también la casa de los 12 linajes, actual ayuntamiento. También dispone de un Parador Nacional con bonitas vistas de la ciudad.
Gustavo Adolfo Bécquer nombra a Soria en varias de sus leyendas, entre ellas la leyenda del monte de las ánimas. También es citada por Antonio Machado en sus versos Campos de Castilla ¡Soria fría, Soria pura cabeza de Extremadura¡ ” y en el romance del Duero de Gerardo Diego.
En sus alrededores se encuentran poblaciones como Almazán, con la iglesia de San Miguel y su cimborrio. Burgo de Osma, donde destacan la catedral con su claustro y la universidad renacentista de Santa Catalina.
Medinaceli es famosa por su arco romano y San Esteban de Gormaz por su castillo y la iglesia de San Miguel. También en la provincia encontramos la fortaleza de Berlanga de Duero o el pueblo de Calatañazor donde “Almanzor perdió su tambor”.
Soria cuenta con parques naturales como el del cañón del río Lobos o el de sierra de Urbión y laguna negra.
La gastronomía soriana destaca por platos como las migas de pastor o los torreznos, el cordero asado o la caldereta y por sus setas, especialmente los níscalos y los boletus, así como por la trufa negra. Un buen acompañamiento son sus vinos con denominación de origen Ribera del Duero. Son reseñables productos como la mantequilla soriana y las yemas de Almazán.
Documentado por Alvaro de Marichalar y Saénz de Tejada